La decoración de las habitaciones es una de las tareas más divertidas del hogar. En estas estancias pasamos gran parte de nuestro día a día y dar el toque personal seguro que es más fácil de lo que imaginas ¿Qué sucede con las habitaciones de bebé, infantiles y juveniles? Decorar las habitaciones de los peques y adolescentes de la casa puede cambiar según sus gustos, edades e incluso aficiones. Tan sólo hay que dejar volar la imaginación porque en la decoración todo está permitido.
Crear un universo distinto en cada etapa de nuestra vida es posible gracias a la decoración de las habitaciones. Los dormitorios de los bebés suelen ser más minimalistas y prácticos: es una época de muchos cambios y necesitamos tenemos todo a mano: pañales, cremas, bañera, mudas, etc. Los tonos de la pintura en pasteles son ideales para esta época para crear ambientes tranquilos en los que el bebé se sienta a gusto y en paz.
¿Qué pasa cuando el bebé se va haciendo mayor? Los muebles convertibles son perfectos para estas etapas de crecimiento. Las cunas se pueden transformar en camas, los armarios se convierten en más grandes gracias a originales extensiones. La pintura y los complementos también comienzan a tomar un tono más divertido, más jovial, respondiendo a las inquietudes de los más peques: dibujos, aficiones, superhéroes, naturaleza… Lo idóneo es que des rienda suelta a la imaginación de los más peques y hagas de su cuarto su propio fortín en el que pasar horas divirtiéndose.
En la época infantil todo vale: paredes que recrean barcos piratas, camas que son coches de competición, peluches que inundan sus camas… Diviértete creando un universo, o varios, en la estancia de tus hijos.
La adolescencia es la primera madurez. Los gustos de los jóvenes comienzan a definirse de una forma más clara y es quizás la época en la que un cambio de decoración en sus dormitorios es la transición ideal de la niñez a la juventud. En esta etapa de la vida hay que darle su espacio a los estudios (ya viene desde la infancia) de una forma más adecuada; las camas se convierten en un refugio, y los armarios... ¡Los armarios comienzan a ser auténticos almacenes de ropa! Los dormitorios juveniles les aportan ese toque maduro pero conservando parte de su esencia infantil en los detalles, como los colores, detalles de la decoración…
Si tienes espacios reducidos no dudes en aprovechar los espacios de forma vertical: estanterías, armarios con altillos, muebles nido… Y si escoges tonos claros se transmitirá sensación de mayor amplitud. Si no controlas bien los espacios, déjate asesora por expertos que buscarán las mejores soluciones para tus necesidades decorativas en dormitorios.